El ministro de turismo de Brasil, Celso Sabino, destacó que las políticas de Estado basadas en la responsabilidad y solidaridad, incluyendo el voluntariado y el turismo comunitario, como la mejor manera de garantizar el desarrollo económico y social de las poblaciones amazónicas y proteger la naturaleza para futuras generaciones.
Las autoridades brasileras coincidieron con los principales referentes del sector empresarial privado que esta visión fortalece el posicionamiento del gigante sudamericano como un destino de primer nivel internacional donde la conservación y la experiencia genuina se combinan para posicionarse ante nuevos mercados.
Brasil cuenta con una oferta turística diversa que incluye su reconocida gastronomía y cultura vibrante, elementos que complementan la apuesta por un ecoturismo auténtico y sustentable. Sabino afirmó que esta variedad es clave para atraer a turistas que buscan propuestas responsables y de calidad.
Con la Ley General del Turismo, Brasil reforzó la seguridad jurídica para inversores y turistas, creando un ambiente de negocios más favorable y simplificando trámites administrativos que favorecerán el crecimiento del turismo sostenible. Esta modernización normativa potencia la confianza y la inversión en un mercado que proyecta un fuerte crecimiento.
Brasil proyecta recibir alrededor de siete millones de turistas extranjeros en 2025, consolidando la tendencia positiva observada en 2024, cuando se registró un aumento del 12,6% en visitantes internacionales, superando los 6,65 millones. En este marco, Europa y especialmente España son mercados clave, posicionados como grandes emisores de turistas hacia el país sudamericano.
El país anunció también un crecimiento del 20% en la oferta de asientos en vuelos internacionales hacia Brasil, con planes de expandir aún más las conexiones aéreas para facilitar el acceso, fortaleciendo así su competitividad como destino global. Esta estrategia resulta fundamental para ampliar el flujo turístico y maximizar el impacto del ecoturismo sostenible.
Finalmente, Brasil resaltó la relevancia de la COP 30 que se realizará en noviembre de 2025 en Belém, Amazonía, como una oportunidad única para mostrar en la práctica el ecoturismo sostenible y discutir acciones contra el cambio climático en el mayor bioma del planeta. Este evento subraya el liderazgo del país en temas ambientales y su compromiso con un turismo que contribuye a la conservación global.
El nuevo Plan Nacional de Turismo fija la meta de alcanzar los 8.100 millones de dólares en materia de ingresos a través de los visitantes que ingresen desde el exterior a lo largo de 2027.